domingo, 2 de agosto de 2015

LA ALCALDESA DE RENCA ODIA LOS 33




Sin duda la semana pasada nos encontramos con unos de los capítulos más oscuros de la Dictadura Municipal de Renca, el despido de 33 profesores por haberse adherido al paro.
En el marco de la movilización docente, profesores de todo Chile, se manifestaron por el proyecto de carrera docente, un tema muy trabado donde un pacto entre el gobierno y la alianza permitirá legislar sobre el proyecto, en contra de la opinión de los profesores que en gran parte preferían retirar el proyecto y volver a crearlo en conjunto (profesores y parlamento)
El viernes 24 de julio de 2015, en votación del Colegio de Profesores se apoya la noción de suspender el paro, el lunes 27 los profesores fueron informalmente notificados al volver a clases que no podían entrar.
Los profesores que no se adhirieron al paro nacional, mostraron sus miedos y trataron con indiferencia a sus colegas desvinculados, como si sufrieran alguna enfermedad contagiosa, ni siquiera los saludaron. Estos 33 profesores venían de una lucha feroz, evidentemente no se iban a quedar de brazos cruzados, rápidamente comienzan a denunciar a través de redes sociales la inhumana venganza de la alcaldesa de Renca.
Se preparan acciones legales, sin embargo, hay que reconocer que en esta materia, pocas veces la municipalidad ha perdido, de alguna manera alcanza con lo justo y a veces de manera forzosa a encontrar una explicación jurídica de sus barbaridades.
Lo que no cabe duda es el odio, por parte de la alcaldesa de Renca a los gremios y sindicatos, a la defensa de los derechos de sus trabajadores, a las organizaciones sociales de oposición y como en toda dictadura, también a la cultura y a la educación.  El día viernes 31 de julio la comunidad renquina apoyó con fuerza y cariño a sus docentes con una masiva marcha, donde participaron; apoderados, alumnos, profesores de Renca, Quinta Normal, Pudahuel, Conchalí y otras comunas solidarias, por supuesto el apoyo de vecinos y Organizaciones Sociales de Renca, la actividad plenamente pacífica, a pesar de la presencia de toda la batería represiva por parte de las Fuerzas Especiales de Carabineros.